Será el viernes 6 de noviembre a partir de las 19,00 horas.
Imágenes, ideas, lecturas harán de telón de fondo a un debate que se propone
pensar la persistencia política y poética de Pasolini en un presente que vio
con más claridad que cualquiera como ruptura violenta y desaparición de la
humanidad.
En la Abjuración de la trilogía de la vida (junio
1975) Pasolini declaraba que con el establecerse absoluto y totalitario del
universo moderno del presente habían ido desapareciendo, además de la
sacralidad del pasado, también el cuerpo («el último lugar en que habitaba la
realidad») junto con la poesía, que daba voz y vida al cuerpo. Dicha
desaparición le había supuesto en los últimos años cada vez más una espasmódica
tensión meta-escritural. Una escritura que «grita» la imposibilidad de la
escritura. En el momento en que las formas colonizadoras del nuevo Poder
consumista parecían coexistir ya biopolíticamente en la «presa de la muerte
sobre la vida» y dar lugar a una neo-burguesía como «forma racial» de la humanidad
entera, él entonces ponía en escena una suerte de aspiración a movimientos
ligeros, extrañados, «mozartianos»: una metáfora de la ilusión, angustiosamente
lívida y prometeica de transformar la muerte en vida artificial, de Orgía
a Pocilga a Saló a Petrolio…
